Por Juan Martín Alonso, especial desde MendozaEs hora de felicidad para el Yoni. Es tiempo de emociones, de gritos al cielo, de miles de saludos, autógrafos, fotos. De más fotos. Es un abrazo largo sobre el ring con su hermano de la vida, el Cotón Reveco. Es un momento de promesas cumplidas también. Es la sonrisa grande del campeón, ancha, sincera, plena.
Ahí está el Yoni, llorando mientras nos habla, recordando a su primer entrenador, Ramón Balbino Soria, ése que le insistía que metiera una y otra vez la izquierda en punta.
La historia del pibe bien humilde que llega a la cima del mundo tras años y años de sacrificios vuelve a repetirse. El premio a tantas soledades en el gimnasio llega al fin para uno que salió bien de abajo. Y por séptima vez, la tierra del sol y el buen vino corona a un campeón en el noble arte de los puños.
Anoche y ante cinco mil almas, Jonathan Víctor Barros (31-1-1, 18KO) se consagró campeón mundial pluma, de la Asociación Mundial de Boxeo, al derrotar por nocaut técnico al panameño Irving Berry (18-2-2, 9KO) en el séptimo round de un combate pactado a doce. El estadio Vicente Polimeni, de la popular Las Heras, fue el lugar para este gran sueño.
El muchacho del barrio Lihué, de Guaymallén, no desaprovechó la segunda chance ecuménica que tuvo este año y salió a pelear con la sed de revancha de haber visto pasar el cinturón muy cerca en marzo, cuando cayó en Alemania por puntos ante el Huracán de Guantánamo, Yuriorkis Gamboa.
Por eso, el pupilo de Ricardo Bracamonte y Pablo Chacón empezó a ser campeón mucho antes. Vencer a Irving Berry era su último escalón. Y se notó en el primer asalto tomando el centro del ring y metiendo molestos jabs y algunos directos que incomodaban un tanto al movidizo panameño. Poco estudio y el Yoni aceleró en las primeras vueltas sacando diferencias en las tarjetas y por ahí comiéndose una mano en upper del visitante. A partir del cuarto round Barros conmovió dos veces al Relámpago y justo en los diez segundos finales. El panameño debía escapar permanentemente del asedio del mendocino y sufrió de más en el epílogo del sexto round. No salió bien al séptimo, Barros metió un fuertísimo directo y el árbitro Raúl Caiz Junior se abalanzó sobre el isleño para que no fuera dañado a los 20 segundos del campanazo. Nocaut técnico y el Yoni que llega a la cima.
“Estuve trabajando muy duro para esto. Hoy estuvo en mi rincón Ramón Balbino Soria quien me puso hace mucho tiempo los primeros guantes. Esto es para él. Esto es para mi equipo, para mi familia, para mi novia. Esto es para todos los chicos de Mendoza, no sólo para los del Lihué. Todos ellos deben saber que con sacrificio y entrega se llega. Se puede”, le expresó emocionado Jonathan a Abajo del Ring en el vestuario y tras la pelea.
Un hijo más de esta tierra deja su enseñanza: no bajar los brazos fue la clave. Argentina suma un título más en un año fenomenal para nuestro boxeo. Y por primera vez Mendoza tiene tres campeones contemporáneos de una misma generación con los cinturones de Juan Carlos Reveco y Yésica Marcos.
En la vitrina imaginaria también hay fajas de grandes como Pascual Pérez, Nicolino Locche, Hugo Pastor Corro y Julio Pablo Chacón. Háganle un lugar a Barros, que llega para marcar su huella.
Peleas complementarias
También hubo cinco peleas complementarias y de gran nivel en el Polimeni. En su debut profesional La Colo Diana Marín no pudo ante Marisa Muñoz y cayó en fallo unánime en la división pluma. Pero otro mendocino sí tuvo un gran debut y Maximiliano Mujica derrotó por nocaut téncnico en el primer asalto a Diego Yovenetti en los superwelters.
También los mendocinos disfrutaron nuevamente a una de sus promesas, el tunuyanino Juan Carlos Cano, que venció a Ángel Junco, por nocaut ténico a los 39 segundos de la tercera vuelta. El Facha estiró su invicto a 8 peleas ganadas, sin derrotas ni empates y con 4 nocauts.
En fallo unánime el sanjuanino Fabián Orozo venció por puntos a Lucas Báez en un combate detenido en el quinto asalto por un fuerte corte del ganador en la división pluma. Además el sanjuanino Mauricio Muñoz venció por puntos a Leonardo Cáceres, en un fallo ajustado. Este es el tercer enfrentamiento entre ambos boxeadores y Muñoz está arriba 2 a 1.
Imagen: UNO
Ahí está el Yoni, llorando mientras nos habla, recordando a su primer entrenador, Ramón Balbino Soria, ése que le insistía que metiera una y otra vez la izquierda en punta.
La historia del pibe bien humilde que llega a la cima del mundo tras años y años de sacrificios vuelve a repetirse. El premio a tantas soledades en el gimnasio llega al fin para uno que salió bien de abajo. Y por séptima vez, la tierra del sol y el buen vino corona a un campeón en el noble arte de los puños.
Anoche y ante cinco mil almas, Jonathan Víctor Barros (31-1-1, 18KO) se consagró campeón mundial pluma, de la Asociación Mundial de Boxeo, al derrotar por nocaut técnico al panameño Irving Berry (18-2-2, 9KO) en el séptimo round de un combate pactado a doce. El estadio Vicente Polimeni, de la popular Las Heras, fue el lugar para este gran sueño.
El muchacho del barrio Lihué, de Guaymallén, no desaprovechó la segunda chance ecuménica que tuvo este año y salió a pelear con la sed de revancha de haber visto pasar el cinturón muy cerca en marzo, cuando cayó en Alemania por puntos ante el Huracán de Guantánamo, Yuriorkis Gamboa.
Por eso, el pupilo de Ricardo Bracamonte y Pablo Chacón empezó a ser campeón mucho antes. Vencer a Irving Berry era su último escalón. Y se notó en el primer asalto tomando el centro del ring y metiendo molestos jabs y algunos directos que incomodaban un tanto al movidizo panameño. Poco estudio y el Yoni aceleró en las primeras vueltas sacando diferencias en las tarjetas y por ahí comiéndose una mano en upper del visitante. A partir del cuarto round Barros conmovió dos veces al Relámpago y justo en los diez segundos finales. El panameño debía escapar permanentemente del asedio del mendocino y sufrió de más en el epílogo del sexto round. No salió bien al séptimo, Barros metió un fuertísimo directo y el árbitro Raúl Caiz Junior se abalanzó sobre el isleño para que no fuera dañado a los 20 segundos del campanazo. Nocaut técnico y el Yoni que llega a la cima.
“Estuve trabajando muy duro para esto. Hoy estuvo en mi rincón Ramón Balbino Soria quien me puso hace mucho tiempo los primeros guantes. Esto es para él. Esto es para mi equipo, para mi familia, para mi novia. Esto es para todos los chicos de Mendoza, no sólo para los del Lihué. Todos ellos deben saber que con sacrificio y entrega se llega. Se puede”, le expresó emocionado Jonathan a Abajo del Ring en el vestuario y tras la pelea.
Un hijo más de esta tierra deja su enseñanza: no bajar los brazos fue la clave. Argentina suma un título más en un año fenomenal para nuestro boxeo. Y por primera vez Mendoza tiene tres campeones contemporáneos de una misma generación con los cinturones de Juan Carlos Reveco y Yésica Marcos.
En la vitrina imaginaria también hay fajas de grandes como Pascual Pérez, Nicolino Locche, Hugo Pastor Corro y Julio Pablo Chacón. Háganle un lugar a Barros, que llega para marcar su huella.
Peleas complementarias
También hubo cinco peleas complementarias y de gran nivel en el Polimeni. En su debut profesional La Colo Diana Marín no pudo ante Marisa Muñoz y cayó en fallo unánime en la división pluma. Pero otro mendocino sí tuvo un gran debut y Maximiliano Mujica derrotó por nocaut téncnico en el primer asalto a Diego Yovenetti en los superwelters.
También los mendocinos disfrutaron nuevamente a una de sus promesas, el tunuyanino Juan Carlos Cano, que venció a Ángel Junco, por nocaut ténico a los 39 segundos de la tercera vuelta. El Facha estiró su invicto a 8 peleas ganadas, sin derrotas ni empates y con 4 nocauts.
En fallo unánime el sanjuanino Fabián Orozo venció por puntos a Lucas Báez en un combate detenido en el quinto asalto por un fuerte corte del ganador en la división pluma. Además el sanjuanino Mauricio Muñoz venció por puntos a Leonardo Cáceres, en un fallo ajustado. Este es el tercer enfrentamiento entre ambos boxeadores y Muñoz está arriba 2 a 1.
Imagen: UNO
- Juan Martín Alonso. Periodista. juanchoalonso@hotmail.com
Grande Goro por la crónica. Sos un groso. Abrazo.
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